domingo, 10 de mayo de 2015

MI TURNO








Me toca el turno a mi, a gatufo, y de entrada os puedo decir que "estoy harto de que pasen de mi" y es cierto, pasan de mi absoluta y completamente.

Tengo razones para decir esto, me sobran mas que motivos para quejarme, y ahora los sabreís.

El emiliano hace un tiempo desapareció de mi casa. Simplemente un día dejo
de estar conmigo, paso un tiempo largo y de repente volvio a estar a mi lado.

Se va, viene, y yo no me entero de nada.

Como soy un gato, es evidente, no cuentan conmigo para nada. Deciden, se marchan, vuelven, y vuelta a empezar una y otra vez.
Menos mal que ella, Cuca, suele quedarse siempre y así yo estoy acompañado
aunque no es lo mismo que tener a los dos conmigo.

Parece ser, me he ido enterando, que el se fué a un lugar que llaman Amsterdam y que está muy lejos.
No se ni entiendo que es lejos, ni el motivo para ir allí, es que no le basta y sobra con estar aquí.
No le falta comida, ni agua, ni buena compañía y se va a ¿Amsterdam?.










Al día siguiente en que desapareció el, emiliano, yo les deje un regalo en mitad
del cuarto de estar.
Podeis imaginar el que, sencillo, no fuí a mi caja y  las deje una pequeña porción de materia orgánica, como hablo, en mitad de la habitación.
Isabel, que había ocupado el lugar de emiliano en mi cama, se enfadó mucho cuando vio mis restos, me chilló, y yo escapé rápido por si se le iba la mano.

Ya no lo he hecho más, con una basta, y así les manifiesto mi descontento por una ausencia absurda e incomprensible.
Luego, cuando vino hablaba con todos menos conmigo, a mi ni caso, y transcurrido un rato una caricia y poco más.
Por que es quien es, si no le mandaría otra vez a Amsterdam o donde fuera.

Emiliano deshacia paquetes, sacaba cosas que entregaba a Cuca e Isabel, y para el gato que soy yo, gatufo, nada de nada.

Harto me tienen, no obstante despues de varios días se me va pasando el enfado y es que necesito sus caricias, su voz, sus atenciones, su presencia
que me alegra mi vida gatuna.










Espero que tarde en marcharse de nuevo o al menos me informe por anticipado, y es que son tan tontos que piensan que los gatos no nos enteramos de casi nada, somos como un mueble que de vez en cuando se mueve.
Y no, yo necesito saber con anticipación si me van a dejar solo, y siendo así me lo tomo mejor.

Humanos despues de todo, que puede esperarse.



yo mismo.